Programas web no tienen suficiente alcance para reemplazar a un profesional en el área.
El papel de un contador público para la aplicación de labores financieras en una organización o persona en Colombia se ha visto impactado por la aparición de programas y apps orientados a tareas operativas que con anterioridad realizaban estos profesionales.
Sin embargo, el manejo o interpretación de los datos contables es un valor agregado que las novedades tecnológicas no pueden reemplazar y que se convierte en el factor diferencial para contratar un profesional especializado, ya sea por prestación de servicios o un contrato laboral en una empresa.
De esta manera, y de acuerdo con el artículo 46 de la Ley 43 de 1990, los contadores públicos tienen autonomía para calcular el valor de sus honorarios, según variables como el tamaño de la empresa, el tiempo de la labor, la complejidad de las tareas a realizar, la experiencia, capacidad técnica o el riesgo profesional, entre otros aspectos.
En este sentido, el portal Siigo revela que los valores por prestación de servicios pueden variar desde un diseño de sistemas de costos y control de inventarios que vale $46,8 millones hasta una valoración contable de una empresa, con un costo aproximado de $39 millones o procesos más simples como una revisoría fiscal por $2,3 millones, según observaciones del Consejo Técnico de la Contaduría Pública (Ctcp).
Por su parte, si se desea contratar un profesional por medio de un contrato laboral, su remuneración variará según el cargo a desempeñar, lista en la que destacan puestos como vicepresidente financiero con un salario mensual de $15,6 millones hasta jefes de costos, compras o cobranza, con un sueldo estimado de $3,9 millones, de acuerdo con Siigo.